sábado, agosto 27, 2011

Halfway there


El morbo es un referente de vida. Al menos así lo creo. Escuchando esta tarde una de mis canciones máximas pensaba en lo excitante que resulta enamorarse. Es tétrico a la vez que lleno de luz, es un sendero árido, pero ya sabemos, sarna con gusto no pica. Cada persona acepta la responsabilidad, es una cruz en cierta manera autoimpuesta. Qué bello es recordar el olor a sangre, a sudor, a pasión, a sexo, a antiguo.. Utilizar la palabra bonito resulta fuera de lugar. Estamos en mitad del camino. Toma mi mano, lo conseguiremos. Dios, qué difícil establecer una línea entre deber y querer. Entre normal y amor. Take my hand, we´ll make it. I SWEAR. ¿Prometer? ¿Quién puede hoy en día prometer, sino puedo prometerme ni yo? Entrecierro los ojos, like a rock and roll player from tha 60´s. Once upon a time, not so long ago. ¿Podemos sentir la energía de alguien por medio de lo que dice? Creo que debemos mirar muy demasiado allá. Hemos creado, entre todos, una sociedad de mentiras y apariencias que lo hacen todo más difícil, pero más placentero. Horriblemente placentero. Llámame masoquista. Cuántos disparos habremos de recibir.


1 comentario:

  1. "Dios, qué difícil establecer una línea entre deber y querer. Entre normal y amor"

    cocococomo lo haces? (L)

    ResponderEliminar